El cuidado y el mantenimiento del cabello se ha convertido, desde hace unos años hacia aquí, en un aspecto fundamental en gran parte de la sociedad. Y es que una buena apariencia es importante para formar una primera impresión sobre alguien. En este sentido, atender las necesidades del pelo requiere tener en cuenta varios factores, tales como el pH.
Para hablar de ello, desde nuestra clínica de trasplante capilar Barcelona te traemos este artículo. Contamos con la experiencia necesaria para tratar la alopecia desde un diagnóstico cien por cien personalizado, con tal de asignar el tratamiento capilar adecuado a cada paciente. Visita la consulta del médico capilar Bruno Jacobovski y encuentra el remedio para mejorar de manera sustancial el estado de tu cuero cabelludo. ¡Te esperamos!
Desequilibrio en el cuero cabelludo y efectos
Cuando hablamos de pH, nos referimos al potencial (p) de hidrógeno (H) que “habita” en el cabello. Los valores ideales en los que se debería encontrar siempre el pH son entre el 0 y el 14. De hecho, la regla del pH afirma que cuando dicho valor supera el 7, se trata de un potencial de hidrógeno alcalino, mientras que cuando es inferior, se considera ácido. Gracias a este cálculo se determinan los niveles de alcalinidad o de acidez que residen en el cuero cabelludo y en el propio cabello.
Pero, ¿es lo mismo el pH del cuero cabelludo y el pH del cabello? Haciendo referencia de nuevo a los valores adecuados, entre 5 y 5,5 se encuentra un cuero cabelludo saludable y, respecto al propio pelo, esta cifra se mueve alrededor del 3.5. Aunque los niveles no son iguales, esto no debe ser motivo de alarma, pues lo importante es que se mantengan dentro del “espectro” de los ácidos. Así, un pelo alcalino tiene un aspecto débil y encrespado, ya que las cutículas “se abren”. De lo contrario, hablamos de un cabello ácido cuando se muestra brillante y más fácil de peinar.
Sin embargo, esto puede desequilibrarse debido a aplicaciones de elementos como tintes, decolorantes o alisados agresivos. En definitiva, productos químicos que persiguen cambiar la apariencia del cabello. De igual manera, el agua de la piscina o del mar en contacto directo y prolongado con la zona capilar puede hacer estragos. Aunque cabe mencionar el punto genético que, como ya sabemos, en este campo de la medicina tiene bastante protagonismo.
Con tal de conseguir un mantenimiento sano del cabello, debemos mantenerlo lejos de productos químicos dispuestos a alterar el equilibrio natural del pH. Asimismo, otros elementos naturales contienen altos niveles de acidez que compensan los valores. Hablamos del vinagre y el limón, entre otros, si bien no se recomienda un exceso de ellos ya que pueden producir el efecto contrario.
¿Cómo determinar los niveles de pH?
Siempre que exista un posible estado anormal del cabello es fundamental ponerse en manos de un médico capilar. Únicamente de este modo se podrá medir el estado del cuero cabelludo y, por consiguiente, conocer qué tratamiento capilar sería el adecuado para las características del paciente.
Y es que más allá de procedimientos como el PRP capilar o la mesoterapia capilar, un especialista en salud del cabello puede orientar en cuanto a qué champú utilizar. Por ejemplo, los champús con bajos índices de pH respetan mucho más los niveles del propio cuero cabelludo y pelo naturales sin llegar a desequilibrarlos, pero suelen ser menos efectivos en cuanto a limpieza en profundidad.
Igualmente, contar con un diagnóstico individualizado es sinónimo de éxito. Y eso es lo que precisamente tratamos en nuestra clínica de trasplante capilar Barcelona. Con el recorrido y la experiencia tanto del médico capilar Bruno Jacobovski como de su equipo, cada paciente podrá seguir una rutina adecuada teniendo como base las particularidades de su cabello. Así que, si crees que tu pelo no luce igual de sano que antes, no dudes en contactar con nosotros. Pide tu primera cita sin coste mediante la página web o llámanos al 667 773 158, ¡te esperamos!
